El Washington Post ha publicado un artículo sobre la psicología que existe detrás de creerse unas noticias o declaraciones, a pesar de que luego se demuestren falsas.
Una de las teorías es que tendemos a creer más cierto algo cuanto más lo oímos.
El artículo da varios ejemplos. En el año 2003, durante la guerra de Irak, salió una noticia que denunciaba que militares iraquíes ejecutaban a soldados de la coalición internacional que se habían rendido ante ellos. Al día siguiente la noticia fue desmentida pero los americanos que la habían oído la siguieron considerando como cierta. Por el contrario, los alemanes y los australianos sí cambiaron de opinión.
Esto sugiere que existe una cierta (y a veces fuerte) predisposición a creer en según qué cosas y que, sin duda, puede ser aprovechada por quien la conozca.
Visto en Mind Hacks.
Actualizo: me gustaría distinguir entre repeticiones externas (las que oímos) y repeticiones internas (las que pensamos). Las dos cuentan a la hora de creer con más fuerza en algo pero sólo las primeras son medibles (de momento).
06 septiembre 2007
Miente (mucho) que algo queda (aunque te descubran)
Publicado por Un barquero chiquitito en 1:33 p. m.
Temática:
EEUU,
Guerra o violencia,
Política,
psicología
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1 comentario:
Pues si que es curioso sí.
Dos años después de la invasión de Irak, tambien salieron unos informes OFICIALES, en los que reconocían que se habían "equivocado" en el tema de las AMD, etc... y aún así sigue habiendo gente que da por cierta esa explicacion para justificar la invasión.
Y así con muuuchas cosas. Da igual que se demuestre que han mentido, la cuestión es si esa mentira sigue fija en el subconsciente.
A veces, me da la sensación de que preferimos seguir engañandonos que aceptar la realidad. ^_
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