Un reciente estudio, que he visto enlazado ya en varios sitios, advierte sobre el hecho de que, cuanto más mayor se hace un joven, más posibilidades tiene de deprimirse si continúa en casa de sus padres o si, una vez se ha independizado, vuelve a vivir con ellos.
Mientras, los jóvenes más jóvenes tienden a deprimirse más si no pueden vivir con sus padres.
Visto en Pure Pedantry.
En general creo que esto tiene que ver con que muchas depresiones se producen por tener demasiado tiempo para pensar (y no saber hacerlo). Normalmente, si te vas de casa (y estás preparado para irte) estás demasiado "entretenido" con los nuevos retos como para dedicarte a añorar la casa de tus padres. Un caso extremo es el de las sociedades no civilizadas donde la lucha por la supervivencia exime a sus habitantes de padecer depresiones.
16 mayo 2008
Me voy para no volver
Publicado por Un barquero chiquitito en 4:55 p. m.
Temática:
Antropología,
Ciencia,
psicología
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