Ya hemos hablado por aquí unas cuantas veces de la malaria y también de algunas ideas para erradicarla, entre las cuales se hallaba en ocasiones, como cooperante, la genética.
Aquí tenemos otra. Esta vez nos llega desde el Instituto de Investigación Médica Walter y Eliza Hallen en Melburne:
El parásito de la malaria, Plasmodium falciparum, ataca a los glóbulos rojos que invade, cambiando su aspecto y sus propiedades físicas de forma drástica.Via Público
Esto provoca que ya no puedan pasar a través del bazo, donde los parásitos serían eliminados por el sistema inmunológico.
Eliminando la cadena de genes 83 se frena la infección de las células impidiendo que se peguen a las paredes de los vasos sanguíneos (eliminando la capacidad del parásito para causar la enfermedad).
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