11 julio 2008

Pide y se te dará dos veces lo que pensabas

Según un reciente estudio, cuando vamos a pedir ayuda subestimamos hasta en un 100% la que nos pueden llegar a prestar.

Al parecer casi todo el mundo está más que dispuesto a ayudar al prójimo en pequeñas tareas si se lo piden, pero la mayoría de la gente no apostaría por ello.

Otro de los errores que cometemos es que, una vez que nos decidimos a pedir esa ayuda, no damos facilidades para que se nos pueda negar. Y es que, dado que casi todo el mundo está dispuesto a echar una mano de vez en cuando, es lógico pensar que, si en un momento dado, por las razones que sean, no se puede (o no se quiere) ayudar, la persona que niega esa ayuda se sienta mal por decirlo.

Y a todo esto, ¿por qué de repente estoy tan seguro de que cualquier comercial del mundo sabe esto desde el primer día de trabajo?

Visto en PsyBlog.

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