La cosa es como sigue: en el estudio examinaron mediante fmri a una serie de pacientes con un Desorden de Ansiedad Generalizado (GAD). Mediante las imágenes resultantes vieron dónde su cerebro se comportaba de forma anómala y aplicaron a continuación (todo esto a grandes rasgos) una dosis de Estimulación Magnética Transcraneal (TMS) en esa zona. Y entre 5 y 6 de cada diez de los pacientes mejoraron.
Los resultados son esperanzadores y es probable que afinando un poco más se consigan tasas ostensiblemente mejores de éxito. Y no sólo eso, podrían aplicarse técnicas parecidas a problemas de origen cerebral de la más diversa índole y de manera individualizada.
En materia de neurociencia seguimos a oscuras pero ensayos como éste dan una idea de lo que ha clareado esa "oscuridad" en los últimos tiempos.
Visto en Brain Stimulant.
11 julio 2008
¿Te sientes ansioso? Apágate un poco el cerebro.
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