Hasta hace unas horas sólo me sonaba su nombre. Pero esta tarde en TCM han pasado Ricas y Famosas (1981) y, como buen especimen del sexo masculino, me he visto obligado a buscar algo más de la que fue considerada por Newsweek en 1977 "la actriz de cine más guapa de todos los tiempos".
Este apelativo resulta curioso, aparte de merecido y compartible, porque, pocos años después (1985), y ya superados los fatídicos 40, Jacqueline comenzaría a prodigarse por los platós de TV (aunque no abandonase los de cine), convirtiéndose en un ejemplo de cómo una innegable belleza no tiene por qué estar reñida con un cerebro perfectamente amueblado.
En 2004 contaba en primera persona su versión del ostracismo al que se ven sometidas las actrices de más de 40 años en Hollywood. Un ostracismo que a ella no parecía haberle afectado demasiado:
"Este negocio del cine, quizá más en América que en Europa, ha girado siempre en torno de la sexualidad juvenil. Aunque no pasa lo mismo en el teatro, en América los espectadores son jóvenes y van al cine para ver la clase de romances o aventuras que les atraen. No existe un cine intelectual en América. Pero no se debe ser demasiado avariciosa. Hay que sentirse atraída por el trabajo mientras se sienta que hay algo que ofrecer. Creo que hay que ser lo más flexible posible. Quizás las mayores superproducciones no estén a tu alcance pero, honestamente, ¿quién desearía estar en muchas de ellas? La mayoría son simples y pueriles pasatiempos para adolescentes y no resulta nada fascinante formar parte de algo así. Resulta frustrante ser utilizada para rellenar una escena sin sustancia, cuando sabes que tienes algo que ofrecer, viendo cómo la cámara pasa de largo como si te cepillara el pelo sin saber lo que puedes dar de ti. La mayoría de las actrices que conozco están frustradas, pero hay que adaptarse a la realidad. Yo salgo ahí fuera y busco pequeños papeles que me resulten atractivos o una película independiente"
O dicho con menos palabras:
"Hay películas buenas para nosotras, pero tienes que ser consciente de los cambios en tu vida. No puedes optar al mismo papel que hace 10 años"
A punto de cumplir los 64 Jacqueline Bisset sigue trabajando. Ha envejecido, por supuesto. Pero aunque ya no aparezca en la lista de las 100 mujeres más sexys del año continúa ofreciendo a los que la podemos ver en la pequeña, o en la gran pantalla, un trabajo bien hecho cada vez que acepta un nuevo papel. ¿Y qué hay más atractivo para un hombre (o especimen masculino) que una mujer inteligente, guapa, que sabe lo que quiere, por qué lo quiere y el modo de conseguirlo? No sé ustedes pero...
Enlace a una página chilena, con continuas actualizaciones, dedicada a la actriz.
17 julio 2008
Jacqueline Bisset
Publicado por Un barquero chiquitito en 7:20 p. m.
Temática:
cine
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario