Un reciente estudio ha observado que cuando alguien piensa que está realizando un acto altruista, en realidad no lo hace porque crea que está bien, sino porque va a ser apreciado, ya que acciones parecidas de otras personas por todo el mundo lo son.
El estudio se ha llevado a cabo realizando escáners del cerebro de personas a las que se les ponía a jugar con un ordenador. El juego tenía dos modalidades: en una de ellas jugaba el propio ordenador y en otra era la persona la que tomaba los mandos. Cuando el ordenador llevaba a cabo una acción "altruista", una zona del cerebro de la persona se "encendía". Esa zona es la misma que la que se utiliza para las relaciones sociales y su intensidad decrecía cuando era la persona la que realizaba el acto. Sin embargo, cuando se les hacía una encuesta a los sujetos poniéndoles delante distintas situaciones en las cuales se podían comportar de una forma más o menos generosa, cuanto mayor era el resultado, mayores habían sido también los niveles de intensidad al ver cómo el ordenador realizaba buenas acciones.
Visto en Boing Boing.
24 enero 2007
Que levante la mano el que se crea buena persona
Publicado por Un barquero chiquitito en 10:51 a. m.
Temática:
Ciencia,
ética,
neurología,
psicología
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1 comentario:
Curioso... desde luego...
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