Recientes estudios con roedores han hallado que poniéndoles a jugar en un entorno variado, y diferente al usual para ellos, son capaces de crear nuevas normas de comportamiento y de regenerar memoria perdida.
Esto hace pensar que no se pierden neuronas sino la capacidad que tienen de comunicarse entre ellas; y que esa comunicación también se podría reestablecer en humanos, mediante estímulos externos adecuados que hiciesen afrontar nuevos "desafíos" a sus mentes.
Visto en Corpus Callosum.
07 mayo 2007
Recuperar la memoria a largo plazo
Publicado por Un barquero chiquitito en 1:26 p. m.
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario